lunes, 26 de septiembre de 2011

Un Coyotito...

Yo sé que la frase aplica para cuando uno va a dormir un ratito, pero yo la uso para cuando voy a Coyoacán (clever jaja). Este fin de semana salí con tres cómplices a pasear por esos lares y debo declarar que me divertí como hace mucho no lo hacía. Estoy segura de que hay miles de reseñas sobre Coyoacán y lo que se puede hacer, ir a tal restaurante, o equis museo. Pero dado que nuestra economía iba para mucho menos, sólo nos limitamos a ir por nuestro delicioso y tradicional cafecito del Jarocho (lo primero que hicimos al llegar). De ahí en fuera nos dedicamos a dar la vuelta. 

Buscamos una banca para terminar de disfrutar de nuestro cafecito; cuando un chico muy agradable se cercó para ofrecernos pulseras que él mismo tejía, por supuesto le compramos una (les digo que la economía no iba para mucho). Luego se acerca otro chico agradable a hablarnos de los derechos humanos y ofreciéndonos pulseritas (la pura variedad) para apoyar a la causa y por supuesto, cooperamos. 

Dando una vuelta por el parque nos topamos con un excéntrico diseñador que cuestionó la felicidad de una de mis cómplices y que además nos ofrecía trencitas fashion a una módica cantidad de setenta pesos cada una; por supuesto declinamos las generosa oferta. No dejamos de pasar por la fuente para tomar la foto del recuerdo cuando vimos a otro chico agradable regalando abrazos y aprovechamos para devolver la felicidad a nuestra amiga solicitando al chavo su respectivo producto (al fin era gratis); luego fue mi turno pero mis amigas me hicieron la broma de fingir que no salía la foto y el chavo terminó regalándome más de uno,  por bromas y risas no paramos.

Entre tanto, fuimos a dar con un grupo de chicos que pedían apoyo para una ley en contra del Ecocidio y claro, terminamos firmando una bata y una lista para saber más adelante del proyecto con lujo de detalle.

En fin, en Coyoacán se puede hacer de todo, desde tomar buen café, adornarse el cabello, conseguir abrazos gratis, adoptar gatitos (regalaban uno ese día) reír mucho, encontrar la felicidad y hasta salvar al mundo, y todo con menos de cien pesos y tres amigas igual de extrovertidas.
Las tres cómplices posando para la foto del recuerdo.


martes, 20 de septiembre de 2011

¡FANGIRL de profesión!


Hace poco un amigo me pidió que le ayudara a promover su programa de radio por internet (por supuesto soy fan) y empecé por twitter a hacerla de copy para mandarle seguidores y caí en cuenta que la mayoría de mis posts son en pro de una u otra cosa –desde derechos de animales hasta grupos de rock finlandeses, pasando por una reportera de finanzas-, en definitiva sabía en qué me había convertido: una FANGIRL.

Haciendo recuento, ya era una. Me uní al club de fans –creo que hace ocho años- de un grupo de rock mexicano llamado DLD (contracción de su primer nombre, un juguete sexual) y andaba un poco crushing con ellos –todavía lo estoy- y posteaba mucho de ellos en mi muro de msn, a cuanto amigo tenía se los recomendaba, conocí a más amigos por parte del club y con la llegada de MySpace mis primeros amigos fueron las bandas que me gustan -kinda freaky, lo sé- y les posteaba seguido; y no se diga de la alegría que me daba cuando Perttu de Apocalyptica me respondía un mail –una o dos líneas, pero ¡aún así era asombroso!-, jugaba con Photoshop para hacer posters y sin duda iba a los conciertos –los que mi cartera podía soportar-.

Entonces me puse a pensar, he invertido mucho de mi tiempo en línea en todos a quienes admiro, ¡ser una Fangirl es un trabajo de tiempo completo! ¿Involuntario?, tal vez, pero a fin de cuentas; el post de una se propaga por las redes sociales cuan pólvora virtual, lo que hace llegar a los famosos a generaciones futuras.

¿Lo único que deseamos –y a veces obtenemos- como remuneración? es una foto, un pase a camerinos, una playera autografiada o atrapar lo que lancen del escenario. No parece ser mucho, pero para las miles de fangirls que abundan siquiera en el D.F. y Área Metropolitana se convierte en una competencia por destacar para que su artista favorito les siga en Twitter.

Trabajando de Fangirl en una tocada de DLD. En foto: Paco Familiar

lunes, 12 de septiembre de 2011

Andy Whitfield

Al abrir twitter y leer el primer post tuve para andar en low mood todo el día, Andy Whitfield, actor galés que interpretó a Spartacus: Blood and Sand en la serie de Starz, falleció el día de ayer, perdiendo la batalla contra el Linfoma no-Hodkin -una de las mil variedades del cáncer- después de dieciocho meses, en Sidney, Australia.

Ante esto Vashti Whitfield, su mujer declaró "En una bonita mañana soleada en Sidney (...), rodeado de su familia, en los brazos de su afectuosa esposa, nuestro joven y guapo guerrero Andy Whitfield perdió su batalla de 18 meses contra un linfoma".

Andy se encontraba promocionando Spartacus: Blood and Sand cuando en marzo de 2010 fue diagnosticado con el Linfoma no-Hodkin. A esto, Starz decidió grabar una precuela (Spartacus: Gods of the Arena), dándole tiempo a Whitfeld de recuperarse y grabar la segunda temporada, pero seis meses después, en septiembre de 2010, se dio a conocer que las complicaciones que había tenido Andy con el cáncer le impediría rencarnar a Spartacus, por lo que la cadena decidió llamar a Liam McIntyre, no sin el visto bueno de su predecesor.

Desafortunadamente el pasado 11 de septiembre "en una mañana soleada de domingo", Andy Whitfield fallece a la edad de 39 años.

Ahora la espectativa ronda en la nueva temporada de Spartacus: Vengeance, ya que a partir de este domingo, Andy Whitfield quedó inmortalizado en el corazón de todos los fans.

Andy Whitfield en Comic Con 2010 promocionando Spartacus: Blood and Sand

martes, 6 de septiembre de 2011

Zombie...

Declarándome una irremediablemente fan de los videojuegos de zombies (en especial de la saga Resident Evil), vagando hoy por la red, me he topado con una maravilla de trailer que me dio ganas de correr a la tienda de gamer más cercana.

Su nombre es Dead Island, un videojuego desarrollado por la compañia Polaca Techland, -los mismos que crearon el polémico Call of Juarez- que salió el día de hoy en Estados Unidos y lo esperamos en el resto del mundo para el 9 de septiembre -nada de diferencia-. Lo que me ha cautivado es su impresionante narrativa al cuadrado. Sí, el trailer nos explica como una familia atrapada en un hotel trata en vano de defenderse de los zombies que azotan la isla, una niña muere a causa de ello; sólo que la historia se desplaza de principio a fin; y en paralelo se narra en rewind (reversa) hasta converger en un punto medio dejando a los espectadores (en ellos me incluyo) con unos deseos inmensos de jugarlo. Y aunque han pasado sólo horas desde su lanzamiento; ya he encontrado reseñas que califican negativamente el juego, sin embargo, prefiero reservarme el derecho de opinar hasta no haber interactuado con él.

Recuerden que el juego estará disponible para PC, PlayStation 3 y Xbox 360.
Pueden enterarse más en facebook.com/deadislandgame
Ah! y mañana live stream 3:00pm hora del pacífico aquí